Sunday, July 20, 2014

Un beso

Promete que cuando te vayas me darás un beso. No puedo, no podría darte un beso. Solo un pico y ya, por favor, será lo más bueno que me vas a dar.

Elizabeth sabe que ya no regresará. Se ha dado cuenta de todo lo mal que Sebastián la pasa a su lado. Piensa que lo mejor será irse para siempre de su vida, quizás pueda volver con Elena y vivir su vida junto a ella, quizás se pueda enamorar de alguien cuando ella se aleje.

Está bien, te voy a dar un beso; será el último día que nos veamos, me despediré de ti; pero quiero que me prometas que te olvidarás de mí. No me pidas algo que no podré; podría olvidarme de mi nombre, pero nunca de tu rostro; pienso que para esto es la vida, para recordar amores prohibidos: primero Elena, y ahora tú.

Elizabeth le mira a los ojos y tiembla, quisiera decirle que lo ama, pero no lo ama; solo lo ve como un amigo, como un hermano; sí, el mejor hermano: el que siempre estuvo pendiente de ella, que le ayudó con lógica, que le hizo sonreír en su cuarto, que le invitaba a comer las cosas más ricas, que le hizo conocer lugares lindos de Lima, que le tomaba las mejores fotos. Sebastián es el mejor de todos, el hombre más inteligente que ha conocido, pero no se le ocurre decirle todo eso, no se le ocurre decirle nada.

Nos iremos juntos a la sierra, como lo habíamos planeado. Tengo que salir bien temprano para llegar aquí el mismo día. No te preocupes, yo tengo la forma de llegar rápido. Ya, pero llegaremos temprano verdad – Elizabeth piensa que Sebastián puede estar tramando algo, se asusta. Fácil llegaremos a las ocho o nueve de la noche. Ya, ¿y qué haremos allá? Te haré ver ese pueblo, caminaremos por las calles y luego por un cerro y allí nos quedaremos viendo la naturaleza, y nos despediremos para siempre. Está bien.


Elizabeth nunca pensó que se haría amiga de Sebastián para después de tan poco tiempo despedirse para siempre; pero es lo más sensato. Ya le ha hecho mucho daño. Lo mira y lo ve más guapo que de costumbre, lleva el cabello largo y no se ha rasurado, Sebastián, está delgado, aunque descuidado se le ve bien. Desea darle un beso.  

No comments:

Post a Comment