Saturday, September 23, 2017

Reina

Entonces cortaré. Está bien. ¿Mañana temprano? – Alejandra ingenua pregunta. Te esperaré toda la vida, mañana, tarde y noche. Me callo. Yo también me callo – Sebastián besa el celular quedito y en silencio pensando que Ale lo puede sentir.

Sebastián termina por quitarse los zapatos, lleva las medias a rayas y piensa que éstas le han de gustar a Elena. Ella pronto cumplirá 37 años, en unos años más llegará a los cuarenta que siempre quiso y como se lo dijo la bruja: Serás eternamente joven.

******  
Y la reina es…. La profesora la hace larga, todos creen que es la chica de los votos rotos. El profesor Carlos espera con un ramo de rosas amarillas para despedir a la honorable segundo puesto y que la directora corone a la Mis San Silvestre School.

Y la reina es…. La profesora no considera lo sufrible que es esperar escuchar tu nombre mientras todos te miran, tus amigas, tus amigos, tu madre, pobre mi madre, ella quiere que gane, hicimos todo lo que pudimos para llegar hasta aquí, ahora somos dos, ¿cómo se ha de sentir la chica de mi costado?, ¿ella también deseará la corona?

Lorena está hermosa, sonríe, en verdad es una miss; sus amigas la admiran y se dicen: Se lo merece, es nuestra reina.

******  
Acomoda la almohada, coge el libro de Oppenheimer – Crear o Morir – y se anima a saber de los avances tecnológicos de la potencia americana. Saber de que pronto se podría leer la mente, que se tendría un mapa cerebral.

Pero qué estupidez, en vez de gastar tanto dinero en tanta tontería, debería gastarse más en educación, en comida sana, en ayudar a tanta gente pobre; pero esa es la frivolidad del hombre blanco. Sebastián piensa.

Se soba los pies con ellos mismos, deja el libro a un costado y piensa que debería haber leído algo de derecho ya que el lunes tendrá examen. Mira el celular, son las doce.

****** 
Y la reina es…. Pero por qué es así, no cree que esto ya es mucho. ¿Y si no gano?, ¿cómo salgo de aquí si no gano?, o peor aún… ¿qué pasa si gano?... ¿qué debo hacer? Esto no me lo esperaba, por qué tantas fotografías… acaso no era suficiente con pasar por la alfombra y ahora tengo que soportar esto.

Y la Miss San Silvestre School es… Me desmayo, yo creo que me desmayo… creo que se lo merece Lorena, está tan bonita. Mejor me desmayo y termina todo esto. Ay no, creo que me desmayo, no sé qué me pasa, son lágrimas lo que estoy botando, o es sudor, por dios, qué está pasando, no veo nada, se nubla, creo que gané, la gente me abraza, por qué…. ¿será que gané?... ¿Me están felicitando o me están consolando porque perdía?... ¡¿Qué es eso?!

******* 
Abre el sobre, lee… CANCER.

Elena, gracias por ser eternamente joven – Sebastián llora. Gracias Elena por darme la oportunidad por haberte conocido. Te prometo que siempre estarás aquí, para toda la vida, hoy has cumplido 37 años y yo sin ti, pero tú siempre estarás conmigo.

Sebastián se encoge y siente que Elena le abraza. Elena es una reina, en verdad no ha pasado el tiempo, está hermosa como siempre y como nunca. 



Thursday, September 21, 2017

Tu viaje
Sin número para llamarte
Lejos
Muy lejos.

Tu viaje
Con él
Con ella
Con ellos.

Tu viaje de locura
De intento
De prueba
De ver qué pasa.

Y sonrío
Por tu viaje
A un lindo paisaje
De mi sueño para ti.

Y me callo
Para no decir de tu viaje
Que adiós
Para siempre fue.





“El Príncipe de Cleves para Alejandra”

Tuesday, September 19, 2017

Sebastián Rivas

Ingresan. Ella detrás de él. Sebastián los mira y sonríe. No hacen bonita pareja, ella tiene para más. Sebastián escribe. Pronto entrará el doctor y hará callar a todos, solo ingresará y todo tendrá ese aire académico que ahora dista mucho de lo que aquí se llama universidad.


Gustavo conversa con una fémina – así llama a todas en general -, escucha la música y decide entrar al salón para ver a la gente. Se le acerca a Sebastián para saludarle. Como siempre, mi amigo está callado, desde que lo conozco es así; piensa.

¿Qué tanto piensas Cholito? Nada, todo está bien… ¿ya vendrá el profesor? Sí, él no tarda. La gente está muy alegre. No sé qué les ha pasado, pero ya ahora se callan, ¿por qué te sonríes? Nada, solo he recordado una cosa graciosa. Alguna diablura seguro. Nada - Sebastián recuerda a Alejandra -, solo que ella me recuerda a Ale.

******* 
Es que me has defraudado, no pensé que tú harías tal cosa, que azuzaras para que se agreda a un compañero tuyo. Yo solo estaba jugando – Claudio tiene la cabeza derecha, pero mira al suelo. Te he tenido en gran estima y ahora te veo y no te reconozco; ¿intentas justificarte?, algo que solo podía esperar de otros. Perdón – parece que su voz sale de la nada, a Claudio no se le mueve ni un pelo. El lunes vendrá tu apoderado y espero que no intente justificarte, espero que le confieses a tu padre lo que has hecho, ahora retírate - Claudio coge su control y sale sin despedirse.

Claudio baja las escaleras pensando en qué le dirá a su padre. ¿Pero de qué padre habla el profesor Rivas?, yo no tengo padre. Tengo un maldito padrastro, un maldito borracho que golpea a mi madre y también me golpea. Quisiera arrancar la hoja del control, pero no es de hacer eso.

Este año conoció al profesor Rivas y todo lo que le decían de ese maestro era cierto. Está loco. Gritará de la nada, se parará de pronto y mirará a cualquiera para hacerle una pregunta como ¿de qué estoy hablando? En el momento menos pensado, maldecirá a la especie humana, la llamará animal, bestia, basuralicio. El profesor Rivas les propondrá viajes a parajes de muerte: el Sahara, el Colca de Ciro, el Pasamayo… eso sí, él no irá… pero si se saldrá con él, porque ha salido con los otros grados y saldrá con el grupo de Claudio.

Recuerda la primera vez que conversó con él, parecía tan grande, pero en realidad no lo es, hay estudiantes de mayor estatura que él.

¿Cuál es tu nombre? – Claudio se paró en seco y sintió que el profesor lo inspeccionaba de pie a cabeza, se pone nervioso, él siempre ha sido el mejor y quiere que el profesor Rivas lo vea así, responde claro. Claudio. ¿Eres de primero? Sí profesor Rivas – el profesor se siente alagado porque el jovencito le reconoce. ¿Y es usted inteligente? – el profesor le pregunta como preocupado. Sí profesor. Qué bueno, el próximo año será mi estudiante.

******* 

Ale se fue con Víctor. Sebastián se quedó solo.