Sebastián es el típico hijito de mamá, no que todo lo haya
tenido, porque en un distrito como San Juan de Lurigancho no todo se puede
tener, pero en ese mundo, todo ha estado a su alcance. Solo dedicado a los estudios, bien comido, con ropa bien, siempre limpio. Plus: hijo único.
Antonio es típico hijo del borracho, que tiene que salir a
ganarse la vida al lado de Pipo – su padre-. Que no tiene para comprarse unas
zapatillas decentes, que anda con las mismas mudas porque no tiene más que dos
jeans y cuatro prendas superiores.
Ambos se encontraron en la academia, y se hicieron amigos; y
de pura casualidad, porque ambos no son de hablar mucho, porque ambos se
matricularon tarde, porque se sentaron juntos, porque regresan con la “Z” para
sus casas.
¿Y para dónde vas? San Juan de Lurigancho. Yo también vivo
en San Juan, ¿dónde te bajas? Vivo en las Flores. Yo por Chimú - responde Sebastián-. Chevere,
entonces vamos juntos, pero a mi me gusta caminar por jirón, cruzar el Pte.
Trujillo y de allí tomo los Naranjas. Ya, yo también puedo tomar esos Naranjas.
Los amigos se ayudan:
¿Qué no entiendes? Trigo me está complicando, pero no tengo
tiempo tampoco para practicar mucho. Yo lo entiendo, te puedo ayudar, si gustas
bajas a mi casa el sábado y te ayudo. No puedo yo trabajo. ¿Qué trabajas? Ayudo
a mi padre, él es albañil. El domingo puedes. Sí, dependiendo si no hay chamba,
puedo el domingo más seguro en la tarde. Perfecto, entonces estudiamos juntos
el domingo.
Se cuentan la vida:
¿Qué y Elena ya atracó? Sí, no sabes cholo, me dijo que sí.
No jodas, ya quiero conocerla, si es tan linda como dices. ¿Y tú cuando? Aún no
encuentro a la flaca de Santa Anita, hoy estuve en la mañana por la esquina que
la vi, pero nada; estoy perdiendo esperanzas de que viva por allí, quizás solo
visitaba esa zona. Pero creo que está bien trucha que la encuentres, pero
habiendo tantas flacas. Sí, pero quiero encontrar a esa chica.
Los amigos tienen enemigos comunes:
Ese pata me jode. ¿Por qué? Porque se cree la gran cosa, no
viste que pasó sin pedir permiso y la otra vez me empujó en el quiosco - Antonio en tono adusto -. Ya,
déjalo, está bien grande, fácil te pega. Nada cholo, recuerdas que trabajo con
peso, soy bien resistente. Sí huevón, y la otra vez como con Luiz (Luiz con z)
te bajoneaste. Es que estaba en falta pe, cuando sé que estoy en falta no digo nada.
Ya, a mi tampoco me cae ese huevas.
Los amigos se arriesgan:
Oe Luiz dice para ir a la Marina. Pero está bien lejos
huevas, vamos a llegar muy tarde a casa. Pero qué, tú no dices que tus viejos
no te molestan; por mí, a Pipo no le importa si duermo o no, a él lo único que
le interesa es que esté en la mañana para levantar lata. Ya normal, ¿para qué
vamos? Vamos a comer hamburguesas.
¿Qué tú no eres fiel? Claro, ¿por qué la duda? Pero cómo
vamos a entrar aquí, este es un puterío. Jajajaja, ya sabía que te ibas a poner
así, normal solo vamos a ver qué hacen estos pajeros. No huevas, vámonos,
pueden que tengan el sida – Sebastián es hipocondriaco -. Oe, eres un chiste,
solo pásala bien.
Una chicas se acercan a la mesa, Luiz abraza a dos y las
distribuye para sus amigos. Sebastián tiene mala suerte y le toca una gordita muy
pesada que se sienta en su enclenque pierna. Es cortés, comienza hacer sumas y
restas: “Tengo cien, compraré dos jarras, de aquí a San Juan me van a cobrar
veinte en taxi”.
Oe cholo, no te preocupes, relájate, yo pago – Luiz regala
su plata. No Luiz, yo pago, tengo plata. Jajajaja, este robotito es un Cage –
Luiz está fumando. Cholo, mira – Juan entra a un cuarto oscuro con una de las
chicas -, son sesenta, te invito. ¿Qué tú quieres entrar? No huevas, yo a Elena
la respeto, pero tú estás solo pues. Nada huevas, yo soy hipocondriaco. Oe pero
solo es perreo. Paso, loco, ya se hizo tarde vámonos. Pero ni has terminado tu
jarra. Es que yo no tomo. Puta sano eres chibolo – la gordita se les acerca -,
qué pasa papito no te gusto y le da un beso – Sebastián se pone rosado y baja la
mirada. Jajajaja, oe eres virgen cholo – Antonio se ríe y abraza a su amigo.
No llores huevón, yo también soy virgen.
Los amigos se despiden:
¿Qué pasó?, ¿por qué no viniste? Cholo, hay que ser
realistas, no voy a poder pasar el examen, tengo que trabajar y ya me di cuenta
que no la hago; además, cada vez le entiendo menos matemática. Pero esfuérzate,
yo te voy ayudar. Fácil tú la haces, eres el mejor; tienes tiempo para
estudiar, tienes dinero, puta te envidio cholo. Oe huevas, no pues, yo te voy
ayudar. Cholo, me voy a Estados Unidos. ¿Por qué? Una amiga de mi mamá le debe
un favor – dinero – y como ella tiene residencia puede llevarme para trabajar
allá. Huevas, pero qué vas hacer allá, vas a ser sirviente de los gringos. Sí
huevón, pero tú crees que aquí me espera algo mejor. ¿Y Elena? Elena tiene un
hijo, y es mi mayor, fácil que se desenamora de mí. ¿Te vas huevas? Sí, viene
para proponerles ir a la playa antes de mi viaje; viajo en la quincena. Huevas
tan rápido. Viajo de ilegal.
Los amigos lloran juntos:
Ese Luiz se va de la academia, dice que entra en la Facilazo
– todavía no existía UCV -. Sí, ya sé, ¿qué bien corre olas no? Y tú no te metes.
Huevas, no sé nadar. No jodas, puta no jodas, ¿no sabes nadar? Ven sígueme,
vamos yo te enseño.
Antonio y Sebastián van juntos a la playa, Antonio le
explica y Sebastián lo hace, se emociona sigue avanzando y lo logra, de pronto se
desespera al verse lejos y no encuentra a Antonio y se comienza ahogar.
Jajajaja, puta tú sí eres un chiste cholo, pero sí estabas
nadando. Necesito arena, arena por favor, arena – pisa arena -. ¡Qué!, ¿quieres
que te dé respiración boca a boca? ¿Pero tienes un halls? Jajajaja, concha tu
madre, cholo chistoso – Luiz se burla de Sebastián -. Ya huevón, no lo jodas –
Antonio lo defiende.
Antonio… ¿y cuándo vuelves? Mira, solo voy hacer un dinero
para comprar una casa, como me ha dicho mi vieja, fácil lo hago en tres años;
quiero volver a verte, vamos a estar en contacto. ¿En tres años? Sí, en tres
años, hasta antes. Huevas… en tres años ya no estaré aquí. ¿Por qué cholo? – Antonio se preocupa -. Porque tengo leucemia – Sebastián le mira fijamente a su amigo - y
el doctor le ha dicho a mi madre que solo me queda unos años de vida.