Gemán está en la piscina - lleva sayonaras, truza, polo
manga cero y un gorrito con visera –recostado en una perezosa viendo a los
bañistas. Se pregunta si fue buena idea venirse solo al Caribe, quizás hubiese
sido mejor irse a Europa, al menos allá tendría a quien visitar. Mira su
tablet, Sebastián le ha estado escribiendo.
Buenos días profesor, ¿cómo está profesor? Aquí en el
Caribe, en “Le Martinique” – Germán se lleva un sorbo de su juguito de piña.
Qué bien por usted profesor, la ha de estar pasando muy bien. Sí, es una deuda
que tenía, siempre quise conocer este lugar por una cuestión literaria. Quería
pedirle una cosa, espero no molestarlo – Sebastián piensa que incomoda al
catedrático, pero también sabe que él es muy amable y no le responderá mal.
Para nada chaval - A Germán le sale lo español cuando escribe por facebook -,
ahora mismo estoy tomando un juguito, aquí hace un calorcito que me pone muy
feliz. Quería pedirle que sea mi entrevistado, tengo un blogger donde hago
entrevistas para que luego los comenten mis estudiantes y sería un honor que
usted fuera uno de mis entrevistados.
Después de la ruptura con Arabella, él se prometió que un
océano los separaría hasta que ella aclare sus ideas; por eso Germán no eligió
Europa para estas vacaciones. La entrevista que le propone su alumno es del
tipo personal y seguro que le preguntará por su esposa. Mejor no se
compromete.
Lo siento, pero ahora no puedo; a penas regrese a Lima
estaré haciendo viajes por el interior del país, ya que me han contratado para
dar capacitaciones. No se preocupe profesor, pero si se puede dar el tiempo, le
agradecería mucho. Está bien, ahora me voy a mi habitación que seguro ya me han
dejado el desayuno, que tengas un feliz 28. Igualmente profesor.