Cuando se comparte

Es una mujer, es eso, no importa que sea la hermana de su mujer, no importa que tenga 5 hijos de su amigo, no importa que sea la querida tía de su hija. Lo importante es que es una mujer, con quien se puede acostar hoy, con quien puede satisfacerse sexualmente esta noche. Es una mujer más, no es muy bella, solo es una mujer como tantas, como su mujer.

¿La sedujo?, no… no la sedujo. Es una mujer tonta. Piensa que así le puede sacar dinero a su cuñado. Su marido no gana lo suficiente para poder comprarle las zapatillas a Margarita, así que el cuñado puede comprarle unas zapatillas de Bata a su hija. No importa que para eso se tenga que acostar con el cerdo de su cuñado. Igual, acaso su hermana no se habría acostado con el marido de ella, si es que él no fuera santurrón. No la sedujo, es una mujer tonta.

La coge por la cintura, ella disimula que no quiere, pero es parte del juego. El la abraza, ella le da un golpe en el rostro, - soy tu cuñada, mira a Camila, está allí acostada, déjame, voy a despertar a Juan -, él le besa el cuello, le coge los cabellos – mira a Juan, el idiota está tirado allí en el sofá, ha perdido sus zapatos, ese huevón es un bueno para nada, qué tú crees que me va pegar, no te hagas, es un huevoncito que no puede mantener a su familia, en cambio yo soy un hombre y ahora vas a saber cómo es que un hombre hace el amor.

Y tú puedes mantenerme a mí a mis hijos, tú que eres un mantenido de Camila, no me hagas reír. Ella lo ha molestado, y furioso Gustavo le quita la blusa, le muerde las tetas – si tu hermana tiene dinero es por mi, no te hagas la tonta -, - por ti, no pues papito, que yo sepa tú eras su empleado y hasta ahora sigues siendo su empleado -, - hay hijita, soy su marido y soy dueño de todo, cuánto necesitas cojudita -, - tienes plata Gustavo, pues necesito trescientos soles -, - por poquita cosa me haces perder el tiempo, toma -, mete billetes en el calzón de América, ella se apresura en besarlo y luego saca los billetes y se los guarda en su bolso, lo empuja en el cuarto de su hermana y hace el amor con Gustavo. Después de todo, Gustavo es mejor amante que su marido, Juan no hace cochinaditas. 

Sabes en que pienso en las noches

• ¿Sabes qué pienso en las noches?, pienso en ti… ¿Sabes qué pienso en las mañanas?, solo en ti…No he podido sacarte de mi mente… y tú… estás tranquila… ¡¿Cómo es posible que estés tranquila?!

• Eso es lo que piensas, debo aparentar estar bien…eso quita el peso de lo que siente mi corazón… eso debes hacer. Sabes todo lo que me lastima el que seas tan débil. No entiendes lo que sufro, ¡¿qué más quieres de mí?! , ¡¿qué es lo que esperas de mí?!

Los dos jóvenes lloran.. él intenta abrazarla y ella se niega. Ella se seca las lágrimas y sale de la habitación... camina sola por la avenida y piensa en qué es lo que estará haciendo su bebé. Él se queda en su habitación, le duele el nudo de la garganta, se acuesta en la cama y quiere dormir pero no puede.

Cronos lo sabe

• Hay mucho tiempo.
• Está bien, será para después.
• Tengo que terminar con mi trabajo esta semana, quizás el próximo sábado, no sé pero ya habrá tiempo.
• Pero yo tendré que estudiar y trabajar, solo tengo mis tardes libres  hasta el 26
• Pero ---- (se calla).
• No quiero tenerte lejos, sé que tienes que trabajar. Quiero verte pronto.
• Ya nos vamos a ver, yo te llamo.
• Está bien, pero cuídate, por favor cuídate.
• Tú también, chao.
• Chao.

 

Su sencillez y buen trato, impresionan mi espíritu. Pasa el tiempo, y sigo esperándola… Parece que ni siquiera existiera, o acaso será creación de Hipnos.  

Por qué no crees que estoy enamorado de ti

• ¿Es verdad que estás enamorado de mí?
• Te amo, ¿por qué lo dudas?
• A veces me pongo a pensar y me digo que quizás es que me estás bromeando o en todo caso estas equivocado.
• Jamás te bromaría con eso, te amo. ¿Qué te hace dudar? Te amo. Y sabes, tengo mucho miedo que siendo joven no he podido lograr que estés a mi lado, y pienso que cuando sea viejo será peor. Si ahora solo tengo tu simpatía, cuando sea anciano no tendré nada de ti.
• Eso no pasará. La verdad pienso que no estás enamorado de mí.
• Te lo puedo demostrar, solo dame una oportunidad.

Los dos jóvenes en un bar… ella le mira fijamente y le dice no. Él sonríe, como diciendo es broma – la propuesta que le hizo -, levantan sus copas y las chocan. No dicen nada más que salud. No tienen ningún motivo más que el de ser amigos.

Él está celoso porque ella le cuenta que está saliendo con sus amigos a tomar y conversar como pensaba que solo lo hacía con él. Quiere decirle que se muere de celos, pero cree que si lo hace, ella se molestará; y es lo que menos quiere.

Ella lo mira, y le cuenta acerca de sus miedos. Su vida en familia es absurda, pero es lo que le toca vivir. Tiene miedo de cambiarse de casa, tiene miedo de que su vida se centre en sus hijos y nada más. Piensa que su vida se ha convertido en un callejón de compromisos del que no puede salir.

Salen ambos del bar y caminan hacia la calle principal, él quiere abrazarla, ella quiere abrazarlo, pero se niegan hacerlo por pura vergüenza.

La Clave

Cuando yo muera, alguien te dirá la clave.

Cuando yo muera, alguien te dirá la fórmula.

Cuando yo muera, alguien te dirá la contraseña.

Porque todo lo mío será tuyo.

Porque todo cuanto maquiné lo sabrás.

Porque lo poco que tengo te lo dejaré.

La fórmula comienza con la E de tu nombre.

La clave finaliza con la O de la última letra de mi nombre.

La clave tiene mayúsculas y minúsculas.

La contraseña nos une.