Dices que hay algo perfecto, pero no te has dado cuenta que
ese algo perfecto es producto de tu neurosis. A menos que te olvides de la idea
de la perfección, nunca estarás cuerdo. La idea de la perfección te ha llevado
a la locura. Pensar en términos de perfección significa pensar en términos de
ideología, objetivos, lo que debería y no debería hacerse. Si tienes que
observar un día de descanso, si tienes que hacer tres oraciones, si tienes que
vivir en el convencionalismo…
Tienes que seguir un modelo y si no lo consigues te sentirás
terriblemente culpable, te sientes pecador. Pero el modelo tiene tales
características que nunca podrás seguirlo. Si lo consiguieras, no tendría el
valor que ahora tiene para tu ego.
De modo que solo te quedan dos alternativas. Una, que
empieces a sentirte culpable – como siempre ha sido -, porque a pesar de que
eres inocente, sencillo, inteligente, siempre sientes culpa. Yo no he nacido
para contribuir a ese sentimiento de culpa. Aúno todos mis esfuerzos para
ayudarte a que te libres de toda culpa. En cuando te libras de ella, estallará
el júbilo. Y la culpa tiene su origen en la idea de la perfección.
La segunda alternativa consiste en lo siguiente: si eres
astuto, te volverás hipócrita, empezarás a fingir que lo has conseguido.
Engañarás a otros e incluso intentarás engañarte a ti mismo. Empezarás a vivir
en medio de espejismos, de alucinaciones, y eso es sumamente pecaminoso,
irreligioso, pernicioso.
Finges, lo has hecho – te conozco y sé que lo has hecho -.
Ello te ha llevado a una vida llena de sentimiento de culpa. Te sientes sinvergüenza
y me siento triste por ti.
Yo estoy aquí para sacarte de esa esquizofrenia. Mi
juramento sigue en pie. Yo soy lo imperfecto, yo te conjuro para que dejes de
buscar la perfección y te acompañes por la imperfección. Yo, soy yo como tú.
Este documento, es una adaptación del uno
de los artículos de "El libro del ego" de Osho.